La realidad de la publicidad en cuestiones de género es sencilla: no hay muchas mujeres que sean directoras creativas. De hecho, las mujeres están bastante excluidas en el mundo publicitario. Claro, a menos que sea para venderles productos de belleza o artículos para el hogar.
Según las estadísticas, solo el 3% de los directores creativos son mujeres. Es a causa de ello que varias campañas se han gestado como una medida para revertir estas cifras y empoderar a las mujeres de la industria publicitaria. En Estados Unidos, Kat Gordon, inició en el 2010 una campaña llamada The 3% Movement. Ella era una creativa que había trabajado como directora en varias agencias a lo largo de 20 años y quería inspirar a otras mujeres para vencer el machismo predominante en la publicidad. Consiguió el apoyo de Adobe y desde entonces se ha paseado por distintas ciudades inspirando a las ejecutivas y creativas de todas partes para no ceder en su lucha por la igualdad. La campaña ha logrado incrementar el porcentaje de mujeres que son directoras creativas hasta alcanzar un 11% y espera seguir aumentando.
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Let’s Make The Industry 50/50 Initiative fue otra campaña. Esta fue lanzada por ADC, una organización que premia a líderes creativos en las comunicaciones y pensaba que para lograr la igualdad, también es necesario renovar a las instituciones que premian la publicidad y hacer de las mujeres un grupo competente que represente el 50% de la industria.
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Este año, una iniciativa española se une a la lucha. Más Mujeres Creativas es el nombre de la campaña y busca sumarse a los logros de sus predecesoras para mejorar el panorama publicitario en cuestiones de género y oportunidades. Desde entonces, los colaboradores de la campaña siguen recopilando información que los ayude a ganar visibilidad y a entregar un mensaje más sólido.
Según Más Mujeres Creativas, los principales factores que merman la carrera de las creativas son: “falta de referencias, falta de mentorship, dificultad para acceder a altos cargos en un mundo masculino, problemas de conciliación, brecha salarial, falta de confianza”, entre otras cosas. No cabe duda que combatir el machismo en la publicidad tomará un tiempo, pero confiamos en que causas como esta ganen más seguidores y logren llamar la atención sobre un problema que persiste a pesar de haber conseguido tantos avances en la sociedad.